
Organizando desayunos de trabajo
En los desayunos de trabajo, todo debe estar organizado para que se pueda hacer ambas cosas: desayunar y trabajar.
En las empresas modernas se trabaja en equipo, por lo que se reúnen varias personas para trabajar, presentar ideas o exponer los temas a tratar durante el día.
Afortunadamente, el trabajo moderno dejó de ser una relación estructurada y por demás sobria entre compañeros, dejando paso a relaciones distendidas que se vuelven amenas convirtiendo, por ejemplo, lo que podría ser una reunión aburrida temprano por la mañana, en un desayuno en conjunto donde trabajen todos.
Planificando el desayuno de trabajo
Los desayunos de trabajo se realizan entre las 8 y las 10 horas, y suelen durar entre 3 y 4 horas. No son reuniones sociales, sino para trabajar, por lo que se recomienda el estilo buffet en algún salón de la empresa. Si es en un restaurante, entonces se deberá pactar el servicio con anterioridad, para que todos puedan elegir de una carta acotada y el gasto no se descontrole.
En la mesa de buffet se dispondrán, como en los hoteles, jarras con bebidas calientes y agua caliente, sobrecitos de té, zumos de fruta, leche, yogurt y bollería, pan tostado o fresco, galletas, mantequilla, mermeladas o confituras. Dependiendo de las costumbres de cada país, el menú puede variar, pero tampoco es bueno que los alimentos sean muy pesados, ya que la intención es trabajar.
La cantidad de tazas, vasos, platos y cucharillas será el doble de los presentes, y se puede optar por utilizar servilletas de papel.
El desayuno y el trabajo
Para organizar un desayuno de trabajo debe disponerse de una mesa común, o varias mesas dependiendo de la cantidad de gente que asista , pero siempre teniendo en cuenta de dejar espacio para ordenadores portátiles, anotadores, lápices y otros elementos que se utilicen para trabajar. A diferencia de un almuerzo de negocios, aquí no sólo charlarán, también escribirán, se moverán e intercambiarán papeles.
Si no hay lugar suficiente en la mesa, se puede optar por desayunar primero y trabajar después, dejando sobre la mesa buffet las jarras con bebidas y algunos bollos, para que alguien se sirva si lo desea.
Si se opta por esta situación, mientras todos desayunan, se puede mostrar una presentación en pantalla sobre el tema a trabajar, o si al encuentro asisten personas de otros sectores o sucursales de la empresa, es el momento de presentarlas.De lo contrario, cuando todos estén sentados a la mesa, se pueden hacer las presentaciones pertinentes.