La combinación de colores al decorar las mesas
Los colores de la vajilla para un evento cumplen un rol importante en la decoración de las mesas
Colores armónicos en las mesas
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Cuando se realizan eventos sociales, sean bodas, cumpleaños, aniversarios, etc., se debe jugar y ser creativo en la decoración de todas las mesas, incorporando el mismo mensaje visual para toda la escenografía y la decoración del salón. Y cuando una cena es muy formal y protocolar, la decoración de las mesas no varía mucho, y se tiende a desarrollar un estilo más tradicional y convencional.
Los colores de la vajilla
Para cenas de eventos sociales, puedes seleccionar manteles o individuales dependiendo el tipo de vajilla que tengas, es decir, que debes conocer previamente el tipo de vajilla que se presentará y expondrá: si es de plata, de cristal, si son muy delicados o no, etc.
También, dependiendo de la vajilla disponible, debes escoger el plato de sitio. Este será un elemento que jugará notoriamente en la ambientación; si será de plata, de metal o de cerámica. Es importante saberlo no sólo por la conformación de toda la vajilla, sino también para combinar los colores.
Un plato de sitio de metal o plata tendrá un color diferente a un plato de sitio de cerámica que, en general, son blancos. La armonía entre los colores es esencial.
Con respecto a los centros de mesa, recuerda que sean bajos, con flores que tengan un color que combine con la mantelería y la vajilla.
Colores que debes evitar en la mesa
Hay combinaciones de colores que no son armónicas y debes evitarlas. Por ejemplo, individuales de color rojo y sobre ellos platos de color verde, o manteles de color blanco con platos de cerámica blanca y servilletas blancas. En el primer caso, la combinación de dos colores fríos no coordina visualmente, mientras que en el segundo caso te quedará un sólo color que dará la sensación de falta de textura, de alegría.
Otro punto a tener en cuenta es que si pones la cristalería alegre, no puedes utilizar al mismo tiempo cristalería clásica de filo dorado, por ejemplo, ya que no darías una apariencia uniforme en la ambientación visual de cada mesa.
No es necesario llegar a esas combinaciones para causar impacto, coordinando muy bien los colores, puedes atraer los ojos de tus comensales.
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